La NOM-035 es la primera legislación que trata sobre los factores de riesgo psicosocial en el trabajo, con el fin de prevenirlos y corregir malas prácticas. Conoce más sobre este tema en este artículo.
El 23 de octubre se publicó en el Diario Oficial de la Federación la Norma Oficial Mexicana (NOM-035), la cual trata sobre los factores de riesgo psicosocial.
Este hecho marca un antes y un después en el derecho laboral de nuestro país, ya que por primera vez se da importancia a la salud mental y emocional del trabajador, tanto como sucede con las condiciones sanitarias y de seguridad.
La NOM-035 tiene como finalidad prevenir, diagnosticar y/o corregir las prácticas que generen estos factores de riesgo psicosocial, algo especialmente importante tomando en cuenta que, según estadísticas de la OCDE, México es el país que tiene los horarios laborales más extensos de todas las naciones afiliadas a dicho organismo, con un promedio anual de 2,137 horas trabajadas por empleado, casi mil horas más que la media a nivel internacional.
Estas jornadas largas pueden generar estrés, malos hábitos alimenticios, enfermedades crónicas y desencadenar en diversos trastornos de ansiedad y de ánimo, como son la depresión y la fatiga crónica, entre otros.
La NOM-035 es el sostén legislativo que hacía falta para regular las relaciones laborales desde un punto de vista emocional y ético dentro de las empresas, colectivos y otras organizaciones de trabajo.
Al ser la salud mental algo más cualitativo que cuantitativo, es de suma importancia encontrar un concepto estandarizado que sirva a todos los patrones y trabajadores a establecer indicadores medibles.
Con ese objetivo, la NOM-035 define a los factores de riesgo psicosocial como:
“Aquellos que pueden provocar trastornos de ansiedad, no orgánicos del ciclo sueño-vigilia y de estrés grave y de adaptación, derivado de la naturaleza de las funciones del puesto de trabajo, el tipo de jornada de trabajo y la exposición a acontecimientos traumáticos severos o a actos de violencia laboral al trabajador, por el trabajo desarrollado.”
En esta definición se incluyen precisamente situaciones como los siguientes ejemplos.
La ley contempla estos escenarios como factores de riesgo psicosocial, ya que pueden detonar diversos males en la salud, tanto fisiológica como mental y emocionalmente; sin embargo, existe uno en el que se hace mayor énfasis.
El más severo de los factores psicosociales es la violencia laboral, pues es el ataque más directo contra la salud de un empleado, y a menudo es la suma de varios otros causales.
La NOM-035 define a la violencia laboral como:
“Aquellos actos de hostigamiento, acoso o malos tratos en contra del trabajador, que pueden dañar su integridad o salud.
Actos que dañan la estabilidad psicológica, la personalidad, la dignidad o integridad del trabajador.
Consiste en acciones de intimidación sistemática y persistente, tales como: descrédito, insultos, humillaciones, devaluación, marginación, indiferencia, comparaciones destructivas, rechazo, restricción a la autodeterminación y amenazas.”
Estas acciones que victimizan al trabajador pueden desencadenar depresión, aislamiento, reacciones de violencia física en incluso suicidio.
Es por ello que la reciente legislación busca alcanzar la creación de ambientes laborales agradables, en los que se logre el desarrollo óptimo de las actividades laborales.
Si bien la NOM-035 aplica para todas las organizaciones laborales a lo largo y ancho de la República Mexicana, la forma de implementar esta legislación varía según la cantidad de empleados, pues a mayor número de personas en la nómina, más son las responsabilidades.
En centros de trabajo con 15 o menos empleados, el patrón deberá establecer por escrito y difundir una política general que ayude a prevenir los factores de riesgo, así como a generar las condiciones de respeto necesarias para el trabajo e identificar a posibles colaboradores que hayan sufrido violencia laboral.
Para organizaciones de entre 16 y 50 trabajadores, además de las obligaciones mencionadas anteriormente, se deberá aplicar exámenes médicos y psicológicos a quienes hayan sido víctimas de una experiencia traumática y canalizarlos para su atención especializada.
En lo que respecta para las empresas con más de 50 empleados, se deberá cumplir con todas las acciones anteriormente descritas y llevar un estricto registro de todas ellas para medir la efectividad de las medidas tomadas.
Implementar las disposiciones de la NOM-035 para combatir los factores de riesgo psicosocial en el trabajo es una tarea que debe ser tomada con seriedad y profesionalismo; ya que de no hacerlo puede traer consecuencias que van desde la baja eficiencia laboral y la desmotivación, hasta fuertes multas económicas que deberá pagar cada organización infractora.
De tal forma que para tener éxito en el cumplimiento de esta legislación es necesario que investigues al respecto. Existen algunas guías elaboradas por profesionales calificados que te pueden ser de mucha ayuda; pero si quieres adoptar esta legislación con efectividad, es necesario contar con la asesoría de expertos en la NOM 035 y sus riesgos psicosociales.
En GDM contamos con amplia experiencia ayudando a pequeñas, medianas y grandes empresas a alcanzar los objetivos necesarios para fomentar espacios de trabajo seguros, siguiendo con las normativas impuestas por la ley.
Contáctanos para hablar sobre las necesidades que enfrentas actualmente y para conocer cómo podemos apoyarte.